Fases de una mudanza en Sevilla

Si estás aquí es que claramente te estas mudando o te vas a mudar, y claramente no sabes por dónde empezar. Seamos claros, una mudanza en Sevilla sin organización ni planificación puede ser un auténtico desastre y desde luego no es un camino de rosas.

Aquellos que ya hemos pasado por esta situación sabemos de lo que hablamos, pero los que no pueden llegar a pensar que estamos siendo demasiados exagerados y que no es para tanto.

He aquí las fases por las que pasamos todos cuando nos enfrentamos a una temida mudanza.

Previa limpieza

Cuando nos vamos a mudar y empezamos a escarbar entre todas nuestras cosas es cuando nos damos cuenta que tendríamos que haber hecho limpieza mucho antes. Y es que no somos conscientes de todo lo que vamos acumulando a lo largo de los años. Recomendación, si todavía no estas metido en todo el follón de la mudanza, empieza con la limpieza de cosas porque luego cuando te toca meterlo todo en cajas te alegrarás.

Organización

Tener en mente una buena organización, nos ayuda a tener una visión general de la mudanza mucho más clara. Si la mudanza corre por nuestra cuenta, sería fundamental hacernos con un buen lote de cajas de cartón resistentes y de papel de burbujas para evitar los golpes.

Lo que no se puede es hacer la mudanza dos días antes de dejar el apartamento, porque eso sería igual a meter todo en masa en las cajas, sin ningún orden.

Una buena idea es ir cuarto por cuarto haciendo un inventario, separando los objetos frágiles en otras cajas. Respecto a las cajas, no cerrarlas hasta que no estemos 100% seguros de que hemos metido todo lo que iba en ella. Lo aconsejable es ir guardando los objetos por familiar, es decir, clasificarlas ya sea, por ejemplo, ropa de cama, cosas de cocina, baños, etc.

Prevenir lo necesario

Cuando hablamos que tenemos que prevenir lo necesario, hacemos referencia a que en la mudanza tendemos a guardarlo todo sin miramiento.

Y es que como es normal, una vez que nos adentramos en una mudanza empezamos a organizarlo todo, guardar las cosas para terminar cuanto antes. Pero no hay que olvidarse de dejar lo imprescindible fuera, porque nuestra vida, nuestra rutina continua y, por lo tanto, tendremos que seguir utilizando lo necesario.

Trasporte

Una vez que ya se tengan todas las cosas bien empaquetadas, es el momento de llevarlas al nuevo hogar. No hace falta llevarlo todo en un mismo viaje, de hecho, lo más común es ir poco a poco porque sino puede ser muy pesado. Pero si vemos que hay cajas, muebles o cualquier otro elemento que nosotros mismos no podemos desplazar, es cuestión de llamar a una empresa de mudanzas en Sevilla. De este tema hablaremos más adelante.

Instalación

Ya que todas nuestras cosas han sido trasladadas a la nueva casa, es momento de empezar a desempacar y desembalar todo e ir situándolos. No hay porque tomárselo con prisas, puesto que lo más importante ya este hecho, así que es momento de disfrutar del nuevo hogar y decorarlo a nuestro gusto.

Como hemos mencionado anteriormente, las empresas de mudanzas son protagonistas cuando hablamos de como mudarse. Y es que no podemos pasarlas por alto, ya que la mayoría de las personas que pasan por un momento deciden contratar sus servicios. Además, no nos cabe duda que son de gran ayuda…nos podemos ver altamente beneficiados.

En primer lugar, las empresas de mudanzas en Sevilla se encargan de absolutamente todo, desde el más mínimo detalle hasta de tramitar todo el papeleo que se necesita para llevar a cabo la mudanza. Muchas de las empresas cuentan con el servicio de guardamuebles. Un espacio perfecto para guardar aquellos muebles o elementos de la casa que nos sirven por el momento o que no tenemos espacio suficiente. En Mudanzas Pablo cuentan con una superficie de 3200 metros cuadrados, divididos en contenedores. Esta empresa dispone de unas instalaciones en perfectas condiciones, donde podemos dejar nuestros enseres con total confianza y tranquilidad.

Normalmente todas las empresas siguen el mismo protocolo a la hora de realizar una mudanza. Primero se necesita hacer una primera valoración, donde los profesionales podrán estimar el trabajo a hacer, el tiempo y el dinero que va a suponer. No es lo mismo una mudanza de una casa de 50 metros cuadrados a la de una casa de 150 metros cuadrados. Se necesita saber si se va a tener que hacer uno de herramientas, como son, por ejemplo, plataformas elevadoras.

En segundo lugar, pactar una fecha para comenzar, de modo que la empresa empiece con antelación a preparar toda la tramitación necesaria. No siempre se da la ocasión, pero hay veces que es necesario cortar una calle, o aparcar en zonas de difícil acceso. Ya si hablamos de mudanzas internacionales, todo se complica un poco más puesto que se necesitan más papeles, sobre todo de cara a las aduanas.

Una vez que ya se tienen la fecha y los papeles listos, pues se procede a empaquetar y embalar todo lo que se encuentra en la casa. Como es normal, casa empresa de mudanzas trabaja de una forma. Los trabajadores se dispondrán a hacer un inventario de todo para poder operar bajo un orden. En caso de que sea necesario desmontar algún mueble para su traslado, también lo harán.

De lo más importante… trasladar todo a la nueva casa. La empresa debe estar equipada con los mejores vehículos de mudanzas para garantizar la seguridad de los objetos. En Mudanzas Pablo no importa hasta dónde hay que llegar, aseguran que la mudanza se efectuará tal y como se ha acordado. De todos modos, imprevistos siempre pueden surgir a ultima hora, pero la empresa se encargará de gestionar todo para solucionarlo lo antes posible.

Por último, la fase de entrega. Como su propio nombre indica, la empresa deposita las pertenencias en el lugar de destino. Si es necesario la empresa prestará otros servicios, como el de limpieza, o donación de objetos.

Deja un comentario