Un año más, a estas alturas del año, comenzamos a fijarnos en los números del Sorteo de la Lotería Navidad. Es desde el mes de julio cuando empiezan a venderse más números de la lotería. Año tras año, esperamos con ilusión esta fecha, para probar suerte, y ver si somos agraciados con alguno de los números premiados. Si te estás planteando comprar algún número, tal vez te interese saber cuáles son los más afortunados, y ver si la estadística se cumple en tu caso o no.
Una de las opciones que tienes es revisar las tablas de frecuencias de los anteriores sorteos. El día del sorteo, son muchos los programas de lotería que ofrecen estadísticas diciendo cuántas veces se ha repetido determinado número. Lo ideal sería poder ver las tablas de frecuencia de todos los tiempos y poder analizar los datos, pero con un intervalo un poco extenso puedes hacerte una idea. En lugar de centrarte en los números más premiados una idea es encontrar un boleto con los números más o menos premiados ya combinados. Al final en el bombo entran todos los números. Volvamos a las tablas de frecuencia, si ves que hay algún número que se repite mucho más que otros siempre puedes incluirlo entre tus favoritos, pero no te engañes, esto no eres el único que lo has pensado, la mayoría de la gente cuando mira estás tablas es en busca de los llamados “números calientes”. También mucha gente, huyendo precisamente de esos números intenta buscar los números menos premiados, para probar suerte. Debemos de tener claro, que todos los números tienen la misma probabilidad de salir premiados, mirar tablas, hacer estadísticas, pueden orientarte sobre los números con una tendencia mayor, pero solo eso, es casualidad, no pesa más una bola que otra.
En la lotería nacional, el número más premiado ha sido hasta hoy desde sus inicios el número 5, pero jamás ha terminado en 25 por ejemplo, el siguiente número ha sido el 4 y el tercero el 6. Y en el caso de los números más premiados, son el 1, el 2 y el nueve.
Después, para muchas personas es importante hacer caso de las corazonadas, de las supersticiones o de los números que por el motivo que sea para esas personas son importantes. Y no por ello tienen menos o más probabilidad de que les toque. Por increíble que te parezca, en el mundo de las supersticiones y la lotería, hay para todos los gustos, sin ir más lejos, hay gente que se desplaza a comprar décimos a lugares donde ha sucedido una desgracia, entendiendo que serán recompensados por la suerte, después de una desgracia. Muchas personas en lugar de estadísticas, lo que intentan apelar a la suerte, o hacer rituales, uno de los más comunes es entrar en la administración con el pie izquierdo y exigir al lotero que te dé el décimo con la mano derecha.
Jugar a la lotería, es jugar con el azahar, con lo cual cualquier tipo de elección, estrategia o superstición va a ser la correcta, y si toca evidentemente más.