Ana fantaseaba durante esos instantes entre el final de la cena y las campanadas. Con la copa de vino en la mano y la mirada perdida, un poco ausente del jolgorio que había a su alrededor, pensaba en el nuevo año y en el futuro de su negocio y, por tanto, de sus ingresos. “Es tiempo de propósitos”, se dijo. E hizo el propósito de vender más en el año que iba a empezar. Inmediatamente frunció el ceño: “¡Eso no es un propósito; es un deseo!” Así que esbozó una sonrisa, se excusó a la persona que tenía más cerca en ese momento y se refugió en un rincón para desenfundar su teléfono y ponerse a escribir a dos dedos.
Revisar mis palabras clave
Me pondré en la mente de mis visitantes, me olvidaré de la jerga de mi sector y escribiré textos comprensibles y con el vocabulario que usan mis clientes.
Prestar más atención a la analítica
No sé lo que está pasando ahora; es posible que tenga un montón de usuarios de la web deseando convertirse en mis clientes pero no sé lo que buscan, no sé si encuentran lo que quieren y no sé si yo se lo estoy dando. Pensaré en un par de indicadores que me digan qué es lo que está pasando en mi web y los estudiaré al menos una vez al mes, comparándolo con fechas anteriores.
Crear nuevo contenido para mi web
Pensaré en qué nuevas páginas puedo añadir, rebuscaré entre los mensajes que recibimos para saber qué información falta en la web, abriré nuevas secciones y empezaré un blog.
Facilitar a mis usuarios la interacción
Pondré más accesos al formulario de contacto, comprobaré que todos los procesos funcionan, añadiré enlaces a las redes sociales en las que participo e invitaré a los visitantes a que pregunten todo lo que quieran saber.
Usar más racionalmente las redes sociales
Trataré a cada seguidor como si fuera mi mejor cliente, resolveré sus dudas y atenderé a sus problemas, responderé con rapidez, aprenderé de lo que me dicen y me adaptaré a lo que estén demandando de mi empresa.
Dar más
Ofreceré muestras gratis a mis seguidores más fieles, me esforzaré en ofrecer la mejor información a mis usuarios y daré la bienvenida a los nuevos visitantes con un regalo, aunque éste sea sólo el disfrutar de una buena experiencia en mi web.
Pedir menos
Haré formularios de contacto más breves, simplificaré el proceso de compra y no obligaré a los nuevos usuarios a darse de alta.
Dar más importancia a los detalles
Revisaré los textos de mi web, aprenderé a escribir mejor, haré pequeños cambios uno a uno y mediré los resultados.
Visitar de vez en cuando las webs de la competencia
Mi negocio no es una isla y lo que hagan los demás influye, no sólo en mi posicionamiento en buscadores sino también en el éxito o el fracaso de mis ventas. Echaré un vistazo a lo que están haciendo e innovaré continuamente para ir por delante de ellos.
Buscar ayuda cuando lo necesite
Me informaré sobre las posibilidades y los costes de consultar a un profesional sobre el estado de mi web y de mis comunicaciones en general, y así dar los pasos importantes sobre seguro.
A veces son necesarios muchos propósitos para cumplir un solo deseo. Bueno, aquí vienen las campanadas. Feliz Año Nuevo.